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lava

Creí que me quemaba cuando mis pensamientos eran tuyos
creí que ardería en mis arrebatos y delirios,
en esos, que colmados de pasión suscitaban el deseo más virulento,
exhalación de esa lujuria inconcebible para muchos,
donde mi cuerpo y pensamiento emanaban enfáticamente.

Sentí ser lava dentro del volcán de mi ser,
incandescente, vivaz, palpitante, intensa
embriagada de erotismo, de frenesí, de una energía inusual.

Creí llenarme de ti, de tus caricias, de tus besos
y ser la quimera de tus pretensiones y deseos.

El tiempo no apaga esa llama incandescente,
ese ímpetu por ser y sentir,
ese entusiasmo ardiente por besarte
por poseerte y sentir ser lava entre tus brazos

Meridien

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