Nunca pretendí amarte y sin quererlo lo estoy haciendo,
nunca quise,
pero no hay remedio para tanto amor que recorre mi cuerpo.
Nunca soñé contigo y sin embargo,
ahora no te puedo sacar de mis sueños,
eres alimento para mis entrañas,
pero es insólito,
no puedo devorarte,
porque ni siquieras me perteneces.
Estás tan lejano de mi boca,
tan lejos de mi cuerpo,
mi corazón late por el tuyo,
pero son tus oidos sordos a la llamada de este amor intenso.
Siento que te quiero y sin embargo debo callarlo,
mi voz debe ser muda,
silenciada por una sonrisa,
y yo debo seguir taciturna,
sigilosa en este amor con aroma a silencio.
No hay tiempo para ti ni para mí,
a no ser dentro de los sueños,
no hay tiempo cuando tú no quieres
o cuando la distancia define un espacio inmenso.
Nunca pretendí amarte y sin embargo lo estoy haciendo,
eso sí, en silencio,
para mí, para mis adentros.
Porque nunca pretendí amarte y ahora sé que te quiero.
nunca quise,
pero no hay remedio para tanto amor que recorre mi cuerpo.
Nunca soñé contigo y sin embargo,
ahora no te puedo sacar de mis sueños,
eres alimento para mis entrañas,
pero es insólito,
no puedo devorarte,
porque ni siquieras me perteneces.
Estás tan lejano de mi boca,
tan lejos de mi cuerpo,
mi corazón late por el tuyo,
pero son tus oidos sordos a la llamada de este amor intenso.
Siento que te quiero y sin embargo debo callarlo,
mi voz debe ser muda,
silenciada por una sonrisa,
y yo debo seguir taciturna,
sigilosa en este amor con aroma a silencio.
No hay tiempo para ti ni para mí,
a no ser dentro de los sueños,
no hay tiempo cuando tú no quieres
o cuando la distancia define un espacio inmenso.
Nunca pretendí amarte y sin embargo lo estoy haciendo,
eso sí, en silencio,
para mí, para mis adentros.
Porque nunca pretendí amarte y ahora sé que te quiero.
Meridien, 2007
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