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Negando

Me negaste una y otra vez tus sonrisas,
me negaste tu cariño
y compartir cosas de tu vida,
te escondías detrás de justificaciones
que repetías una y otra vez,
quisieras haberme cegado completamente
pero eso no pudo ser.
Y vi, como a cualquier otra
le dabas más de lo que me diste a mí
y jugabas con ellas
al mismo tiempo que me herías a mí.
Y seguías intentando convencerme
que no había nada allí,
que yo recibía más que nadie
y sin embargo, no te importaba verme morir.
Me negaste, día a día,
rompías el lazo que por algún instante nos unía,
porque nunca quisiste implicarte
y mantuviste las distancias,
distancias bien marcadas
entre tú y yo,
nunca quisiste que me acercara
y menos que llegara a tu corazón,
eso se lo permitías a otras
con quien jugabas a ser otro a quien no conocí yo.

Meridien

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