Tú, estás ahí, al otro lado, escuchando, observando, comprendiendo, tú, en tu silencio de palabras, en tu distancia más cercana, proximidad de sentimientos que se baten al unísono, entre tú y yo una distancia que no se ve, pero aún así tú buscas mis palabras, me escuchas sin saber con certeza que yo lo sé, pero sí, sí se que estás ahí, que te interesa mi voz escrita, mis sentimientos relatados en infinitas letras y por ello, me conmueves, me conmueves desde la distancia que se convierte en nuestra cercanía, desde tu hogar que muchas veces haces mío, desde tu corazón que comparte momentos indefinidos, tú, tú siempre acompañado, acompañado de mis palabras, de mis noches de desvelos, de mis días más intensos, compartiendo sin saberlo. Meridien, 2007
las historias, las palabras, los pensamientos, las inquietudes, los sentimientos... muestran nuestra humanidad más allá de lo predecible