Se ha vuelto a perder la esperanza, se ha escondido de nuevo en este espacio indefinido, en este tiempo limitado de vida con un fin inpreciso, no concreto. Quien sabe cual será su propósito, su voluntad u objetivo, si lo hizo deliberadamente, con pretensión, o tal vez cayó de nuevo en su propio engaño. Quizás fueran los designios de este destino que se esboza entre tormentos y alegrías, entre intenciones y decisiones, con juicios que marcan doctrina. Se ha vuelto a perder la esperanza, se desvaneció ante mi mirada, entre las lágrimas y los sollozos, entre el dolor y el abatimiento de esta alma, propinando de nuevo una estocada. Y cada contusión es recibida, consentida de cierta forma, rechazada desde el silencio, tolerada, aunque no siempre comprendida. Se ha vuelto a perder la esperanza y de nuevo salgo a su búsqueda, cada vez con menos fuerzas, llena de desaliento por tanta batalla. Meridien
las historias, las palabras, los pensamientos, las inquietudes, los sentimientos... muestran nuestra humanidad más allá de lo predecible